Respecto a CI Banco, el Tesoro detectó un patrón de mucho tiempo de asociaciones, transacciones y provisión de servicios financieros que facilitan el tráfico de opioides ilícitos por cárteles mexicanos, incluyendo al Cártel de los Beltrán Leyva, el Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel del Golfo. Además, se le atribuye el apoyo en la compra de precursores químicos desde China, materia prima esencial para la elaboración de drogas sintéticas que después son introducidas en Estados Unidos.