En su toma de protesta como la primera Presidenta constitucional de México, Claudia Sheinbaum Pardo ofreció un discurso centrado en la consolidación del desarrollo social y la estabilidad económica del país. Durante su intervención, la mandataria envió un mensaje de confianza a los mercados y a los inversionistas, asegurando que las reformas no pondrán en riesgo sus intereses.
Sheinbaum reafirmó su compromiso con la autonomía del Banco de México (Banxico) y respondió a las preocupaciones sobre la reforma judicial.
“Sus inversiones están seguras en México”, afirmó.
Además, anunció que en los primeros días de su gobierno se reunirá con representantes de la iniciativa privada para dialogar sobre futuros programas de infraestructura e inversiones.
En cuanto a la relación con Estados Unidos y Canadá, señaló que “no competimos, nos cooperamos”, reforzando la visión de cooperación con los países vecinos.
En respuesta a las preocupaciones del sector empresarial sobre la seguridad, Sheinbaum aseguró que se enfocará en reducir los delitos de alto impacto, dejando en claro que “no regresará la guerra contra el narco de Felipe Calderón”.
La presidenta también sus 10 puntos para un buen gobierno, con los principios que guiarán su administración.
Preservar la unidad interna del partido.
Fomentar la honestidad y rechazar el consumismo.
Prohibir el nepotismo y promover la meritocracia.
Mantener la independencia del partido frente al Estado.
Capacitar a los miembros del partido a través del Instituto de formación política.
Estar en contacto constante con la ciudadanía mediante la movilización social.
Elegir candidatos plurinominales mediante un proceso democrático.
Priorizar la austeridad en los gobiernos morenistas.
Evitar la colusión con el crimen organizado.
Promover la igualdad y rechazar el clasismo y machismo.
Con esta visión, Claudia Sheinbaum busca trazar el rumbo de un gobierno que promueva el desarrollo social y la estabilidad económica, al tiempo que fomente la transparencia y la seguridad en el país.