Esta visión, afirmó, coincide plenamente con la agenda pública marcada desde 2018, que modificó el panorama al reconocer a los pueblos originarios como pilares de identidad, resistencia y desarrollo social. La Presidenta señaló que el libro subraya cómo estos pueblos resistieron la Conquista y, por siglos, fueron excluidos por los gobiernos neoliberales. La 4T, enfatizó, les ha otorgado un lugar central en las políticas sociales y económicas.