“Yo inicio en la política teniendo mi primera campaña en brazos, nazco en un seno político con mi papá quien toda su vida perteneció al PAN, fue de los fundadores de ese partido en el municipio de Corregidora; su primera campaña fue en 1994, un año después de que yo naciera”.
Da click en la imagen para consultar la edición digital
Actual secretario de Desarrollo Social de Corregidora, ya ha sido secretario de Acción Juvenil en el estado de Querétaro, regidor de ayuntamiento y presidente municipal interino en su municipio; este último cargo ha sido una de las grandes aspiraciones del político, que ronda los 30 años de edad.
Aunque lleva el nombre de su padre, Rafael Montoya Becerra, pieza clave para la consolidación del blanquiazul en esa demarcación, tiene una carrera con esfuerzo propio; pero reconoce que su amor por la política nació gracias al ejemplo de servicio de su papá como un activo de su partido.
“Decido enfocarme en el servicio público cuando yo veo que a nuestra casa acudía gente, personas que siempre buscaban una solución y esta solución la buscaban en mi papá; yo veía cómo mi papá hacía lo imposible con tal de ayudar a la gente de Corregidora, él era orgulloso de su municipio y de su gente y él buscaba la manera de ayudar a la gente, pero también buscaba que el municipio siguiera prosperando”.
Cuando el joven tenía 21 años de edad, en agosto de 2014, falleció su padre, por lo que se vio obligado a truncar su carrera en Derecho en la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) para enfocarse en el cuidado de su madre, de su hermana, hermano y también de su abuela paterna.
“Me tocó afrontar un reto familiar porque era hacerme cargo de mis hermanos, de mi hermana, de mi hermano, y de mi mamá, también estar cerca de mi abuela que perdía a su segundo hijo (…). Abandoné momentáneamente la universidad para hacerme cargo del negocio familiar y mi principal prioridad era que mis hermanos pudieran terminar sus estudios. Me dediqué a trabajar y me alejé dos años totalmente de la política del partido”.
Tras la pausa, Rafa Montoya retomó sus estudios y se graduó en la Universidad de Londres. En el plano político, se postuló para dirigir la Secretaría Estatal de Acción Juvenil, que es el brazo de operación de la juventud panista, llegó a ese puesto en candidatura de unidad.
Montoya Bolaños en los estudios de AD Comunicaciones. Foto: Alejandra Luján
ADMINISTRACIÓN MUNICIPAL
Cuando tenía 25 años, Rafa Montoya fue invitado, por el entonces candidato a presidente municipal Roberto Sosa Pichardo, para formar parte de la plantilla de regidores para la campaña de 2018; elección que fue ganada.
“A mis 25 años llegué como regidor y en los días previos a tomar protesta, el alcalde Roberto Sosa me citó en su oficina y me invitó a ser el coordinador de los regidores del PAN; había gente con una trayectoria mucho más larga que la de un servidor, yo era el más joven dentro del cabildo, sin embargo, era el de más confianza del alcalde”.
Ser coordinador del cuerpo de regidores de Acción Nacional significó un reto y una curva de aprendizaje y experiencia.
“En el Ayuntamiento se generó una muy buena amistad, todo transitó muy bien, los tres años hicimos muy buen equipo con los regidores de los demás partidos, porque si algo teníamos en común en el municipio de Corregidora en 2018 es que todos los regidores queríamos lo mejor para Corregidora, un Corregidora próspero, un Corregidora que siguiera con la ruta que ya había marcado el alcalde, y hoy gobernador, Mauricio Kuri González, y que Roberto se ha encargado de ir sobre ese mismo camino”.
Su trabajo en el ayuntamiento lo llevó a ser el elegido para ser presidente municipal interino, cuando Roberto Sosa participó como candidato para reelegirse en 2021.
“Me quedé 115 días al frente del municipio y fue una experiencia inolvidable, muy contento porque la verdad es que mi sueño siempre ha sido servir a las y los ciudadanos de Corregidora, al municipio que me vio nacer y al que con mucho orgullo he visto crecer y desarrollarse durante todos estos años”.
Rafael Montoya ha sido testigo de la evolución del territorio municipal en Corregidora: desde la llegada del primer centro comercial, la primera tienda de autoservicio, la pavimentación de las calles, los primeros cines, boliches y tiendas departamentales, hasta el desarrollo industrial que caracteriza a esa demarcación.
Ese mismo año, tras el proceso en el que Sosa Pichardo logró la reelección, una nueva invitación llegó para Montoya Bolaños: la de encabezar la Secretaría de Desarrollo Social, cargo que ocupa desde el 1 de octubre de 2021, a la fecha.
VALORES FAMILIARES
Para el secretario de Desarrollo Social, su padre y su madre son quienes le inculcaron el amor por servir; con ello, una serie de valores éticos y personales que son parte de su vida diaria.
“Por parte de mi papá tengo el amor y el servicio a los ciudadanos de Corregidora, él siempre fue muy orgulloso de trabajar para los ciudadanos; la humildad, porque sin importar el cargo político que él tenía, me enseñó a que siempre nos llamen por el nombre y no por el cargo, porque los cargos son temporales, se terminan, dejas de ser alcalde, presidente, secretario, pero el nombre es tuyo, por eso me gusta que me digan Rafa, es mi identidad.
Otros valores que tengo son la honestidad, sobre todo en el tema del servicio público es muy importante, y por eso aplico la frase, a lo mejor muy trillada entre los servidores públicos, pero me queda muy claro que ‘el que no vive para servir no sirve para vivir’, eso también me lo enseñó mi papá”.
Al hablar de su mamá, reconoce también en ella una vocación de servir: “en el caso de mi mamá, aprendí la alegría inmensa de vivir, el de ayudar a la gente; yo te puedo decir que mucha de la gente a la que yo ayudo en la oficina es porque mi mamá ya la recibió, ella busca siempre cómo ayudar a las personas”.
EL VALOR DE LA PALABRA
Cumplir con la palabra empeñada es otro de los valores que heredó de Rafael Montoya Becerra, al entender que es de las cosas que tienen desencantada a la ciudadanía de los políticos.
“Un aspecto importante es el valor de nuestra palabra, soy una persona que si me comprometo a algo, ya sea de manera inmediata o que tarde un poco, lo cumplo. Hay una frase que yo utilizo a título personal y es que ‘la credibilidad de un político se mide en el cumplimiento de la palabra’”.
Rafa Montoya en el estudio de AD Comunicaciones. Foto: Alejandra Luján
JUVENTUD Y POLÍTICA
Con 30 años de edad, Rafa Montoya ve en la juventud la oportunidad de cambiarle el rostro a la política, reconoce que hay una apatía ciudadana, producto de malos gobiernos, y ve una falta de interés en participar, no solo de los procesos de votación, sino de postulación a cargos públicos.
La poca participación ciudadana se reflejó en las elecciones, cuando se votó para la gubernatura de Coahuila y el Estado de México en junio pasado.
“Creo en los nuevos políticos, por eso los jóvenes tenemos que involucrarnos y generar esta nueva generación que queremos ayudar a la ciudadanos; los servidores públicos no tenemos una varita mágica, pero por eso tenemos que ir a las colonias a conocer lo que se necesita y saber cómo sí podemos ayudar y cómo podemos involucrarnos”.
Como servidor público en Corregidora, reconoce que los principales retos de la municipalidad se concentran en el crecimiento demográfico del municipio.
Ello implica la atención a los servicios públicos, pero también el de garantizar seguridad para que la demarcación se mantenga como un buen lugar para vivir.
“Debemos reforzar la seguridad, seguir siendo un municipio seguro, un municipio blindado; crecer con reglas de desarrollo urbano, crecer con orden y, un tercer reto, la movilidad”.
Actualmente, la política social del municipio corregidorense transita en tres grandes vías: educación, juventud y economía familiar.
En el rubro de educación, el municipio entrega becas a más del 50 por ciento de estudiantes de primarias, secundarias públicas, y a más del 60 por ciento de universidades públicas.
“Entregamos en dos etapas: la primera etapa se paga antes del 30 de junio y la segunda, antes del 30 de noviembre. Este programa es para que en Corregidora la economía no sea un pretexto para no seguir estudiando; lo ha dicho el alcalde, y yo también lo creo firmemente, que no hay mejor inversión que la educación. La única manera de tener una sociedad organizada, que pueda seguir adelante, que crezca, es apostándole a la educación, a la cultura y al deporte”.
El segundo programa emblema, explicó Montoya Bolaños, es el de calentadores solares, que está pensado para el cuidado del medioambiente, pero también para generar ahorros en el gasto familiar.
“Al concluir este año habremos llegado a 14 mil calentadores en beneficio de la ecología, pero también disminuimos el gasto de gas; es un beneficio a la economía familiar que ha sido muy afectada, porque reduce el 50 por ciento del gasto de gas que hacían semestralmente”.
Un tercer eje de Desarrollo Social es la juventud, apostar para detectar conductas de riesgo y prevenir problemas de alcoholismo y drogadicción.
“Además de apostar a detectar estos problemas, trabajamos en concientizar a los próximos conductores, que son todos estos jóvenes que van a obtener su licencia o permiso de conducir y les explicamos que el alcohol y el volante no se llevan”.
Comparta este artículo
