Desde 2009, Querétaro eliminó el cobro de la tenencia, medida que implicó dejar de recibir más de 400 millones de pesos de ingresos federales. A pesar de esta reducción, la administración estatal ha mantenido la estabilidad financiera, apoyándose en la recaudación de otros impuestos y contribuciones locales. La decisión de mantener el costo cero busca incentivar la formalidad de los vehículos, facilitar el cumplimiento de obligaciones a los contribuyentes y ofrecer certidumbre a los propietarios de automóviles.